Frente a la costa siciliana, Malta es un archipiélago de islas e islotes paradisíacos. Famosa por el increíble patrimonio arquitectónico legado por los Caballeros de la Orden, también seduce por la belleza de sus costas, la diversidad de sus paisajes y su fabuloso clima.
En las islas maltesas, el mar y el sol son omnipresentes. Entre playas de arena dorada, playas de arena roja, lagunas azules, costas rocosas o incluso mares interiores, inevitablemente encontrará su propio pedacito de paraíso. Además, gracias al clima templado de Malta, tendrá la oportunidad de nadar casi todo el año. Descubra la bahía de Balluta en Sliema, donde podrá practicar numerosos deportes náuticos: vela, windsurf, jet-ski, parapente.... Para bucear, diríjase a Ghasri, en la isla de Gozo, y explore numerosas cuevas submarinas enclavadas al pie de altos acantilados. Pero también aproveche los magníficos paisajes para disfrutar del senderismo, el ciclismo, la equitación o el golf.
Después de unos momentos de ocio o de actividades en la playa, descubra la riqueza de las ciudades maltesas. En el corazón de la capital, La Valetta o La Valetta, disfrute de la ciudad amurallada declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Construido por los Caballeros de la Orden de Malta, tiene una planta totalmente cuadriculada. A lo largo de su laberinto de calles, se puede admirar la co-catedral de San Juan, el Palacio de los Grandes Maestros, la Posada Castellana, construida en el siglo XVI, pero también monumentos recientes como la gran escalinata, el teatro al aire libre y el parlamento, diseñado por el arquitecto Renzo Piano.
Cerca de La Valetta, visite también las tres ciudades de Bormla, Senglea y Birgu. También fundadas por los Caballeros, a menudo son consideradas como la cuna histórica de la isla. En Birgu se encuentra el famoso Fuerte de San Angelo, que resistió el Gran Asedio de los Otomanos en 1565. A continuación, descubra los templos megalíticos de Ggantija y el Hypogée de Hal Safliéni, un complejo monumental de salas subterráneas construidas en tres niveles entre 4000 y 2000 años antes de Cristo. Pero también aproveche su estancia para caer bajo el hechizo de los balnearios de San Pawl il Bahar y San Gijan. Ambos tienen innumerables restaurantes donde se pueden degustar especialidades locales: pastel de pescado, kapunata, bragioli, queso de cabra, pastizzi, kannoli....