Desde las orillas del Mediterráneo hasta las montañas de Cévennes, pasando por la Camarga y las Gargantas del Gardón, Le Gard ofrece una increíble variedad de paisajes. En este escenario auténtico, con su rico patrimonio, sus vacaciones se caracterizarán inevitablemente por la relajación y el asombro.
Aunque no muy extensa, la costa de Gard tiene un encanto inmenso. Alrededor del antiguo pueblo de pescadores de Grau du Roi y su famoso Puerto Camargue, las playas parecen interminables y se mezclan con los paisajes únicos de la Camargue. En este entorno único, podrá disfrutar de todos los placeres del Mediterráneo: ocio, natación, deportes náuticos... Si prefiere bañarse en agua dulce, únase a las orillas del Gardon, del Cèze o del Vis. Estos idílicos ríos también son ideales para el piragüismo o, en sus orillas a veces escarpadas, la escalada y la vía ferrata. Los más deportistas pueden prolongar su deseo de hacer ejercicio uniéndose al Espace Gard Découvertes de Méjannes-le-Clap o al centro mecánico Alès Cevennes.
Tierra de historia estudiada por celtas, romanos y camisards, el Gard también le invita a descubrir un patrimonio excepcional. En Nîmes, la Roma francesa, podrá admirar los restos de la época romana: arenas, la Torre Magne, la Casa Cuadrada, la Puerta de Auguste, pero también los magníficos edificios religiosos: la Catedral de Notre-Dame-et-Saint-Castor, la Iglesia de Sainte-Perpétue-et-Félicité... A continuación, diríjase a Ales, la puerta de los Cévennes, y disfrute del Fuerte Vauban, de la Catedral de Saint-Jean-Baptiste y de los numerosos parques y jardines de la ciudad. Pero también visite Saint-Gilles y su abadía construida a partir del siglo VII, clasificada como Patrimonio de la Humanidad, Aigues-Mortes y sus bellas murallas medievales, Uzès por su increíble dulzura de vida y su torre de Fenestrelle.....
A continuación, tome los innumerables senderos de senderismo (9.000 kilómetros de rutas señalizadas y mantenidas) o senderos para bicicletas de montaña para disfrutar de los otros lugares imprescindibles del Gard. Estos senderos le llevarán bajo los arcos del suntuoso Pont du Gard, también declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, al Circo de Navacelles, al abismo de Bramabiau, al Parque Nacional de Cévennes o al corazón de la arboleda de bambú de Anduze. También le permitirán descubrir otras ciudades inolvidables: Le Vigan, Barjac, Sauve, Lussan, Sommières... y hacer algunas paradas gastronómicas para degustar los sabores de la zona: fougasses, cerdo con cévenole, brandade, arroz Camargue, pilardons....