Cerca de Auvernia y Périgord, Corrèze es un destino poco común donde la naturaleza salvaje y los pueblos medievales proporcionan una sensación inmediata de cambio de escenario. Entre las gargantas del Dordoña, el Causse, la meseta de Millevaches, pero también el patrimonio y los tesoros gastronómicos, el departamento le ofrece muchas oportunidades para maravillarse.
Territorio con un fuerte componente rural, Corrèze se estructura en torno a dos grandes ciudades con un rico pasado. Tulle, la prefectura, está seducida por su centro histórico que alberga numerosos monumentos. Paseando por las magníficas callejuelas del barrio medieval de l'Enclos, podrá admirar la catedral de Notre-Dame, construida en el siglo XII, su magnífico claustro, pero también una multitud de antiguas residencias como la Maison Loyac con sus dos torres en la fachada. Brive-la-Gaillarde, la ciudad más poblada del departamento, también tiene un impresionante corazón histórico. Podrán apreciar la colegiata de Saint-Martin, construida a partir del siglo XI, la capilla de Saint-Libéral, la torre de Les Échevins......
A continuación, descubra los magníficos parajes naturales y los suntuosos pueblos de Corrèze. Al norte del departamento, explore el Parque Natural de Millevaches y su asombrosa diversidad de entornos: turberas, bosques de hoja caduca y coníferas, páramos, prados... Al sur del parque, cerca de Neuvic, sumérjase en el corazón del magnífico paisaje de las gargantas del Dordoña y, en las cercanías, acérquese a las Orgues de Bort, prodigiosos flujos basálticos coronados por una meseta que ofrece una vista panorámica de la cordillera de los Montes Dore. A continuación, siga el río Dordoña para admirar los pueblos de Argentat y Beaulieu sur Dordogne, que se encuentran entre los más bellos desvíos de Francia.
Muchos otros lugares mágicos merecen su atención, como los cinco pueblos más bellos de Francia en Corrèze: Collonges-la-Rouge, Curemonte, Saint-Robert, Ségur-le-Chateau y Turenne. Para descubrirlos, recorra los 1.000 kilómetros de senderos de senderismo, los 1.000 kilómetros de senderos para bicicletas de montaña o los numerosos circuitos de equitación del departamento. Pero también se pueden admirar desde el cielo a bordo de un avión ultraligero, un globo aerostático, un parapente, un gabare o una canoa. Durante sus excursiones, haga algunas pausas gourmet para saborear la cocina local: farcidure, setas rellenas de porcini, tourtous, chanterelles, trucha, lucio, adoquín correzian, flaugnard, clafoutis....